[COMUNAS] Continúan los ataques contra la EPS-La Carbonera en Mérida

Las agresiones contra la organización popular por parte de quienes nunca han creído en su capacidad productiva y su potencial orgánico, se promueven con más fuerza en momentos de crisis.

Hoy, la lucha comunal es doblemente atacada, por un lado la crisis inducida desestabiliza y pone en riesgo la organización construida y por el otro los terratenientes y dueños del poder económico arrecian con amenazas y recurrentes sabotajes.

El pasado miércoles 28 de febrero, la EPS-La Carbonera, ubicada en el territorio de la comuna “Cuencas Unidas de Macho Capaz” en el estado Mérida, enfrentó un intento de invasión. Aproximadamente a las dos de la tarde, familiares del antiguo dueño junto a sus escoltas y un grupo de personas de la comunidad, ingresaron al predio con cuatro camionetas, mientras se encontraban en el lugar tres productoras y productores de la Carbonera, además de seis servidorxs públicxs. El argumento que «justificaba» su presencia en el territorio consistía en que la comunidad había solicitado la recuperación de las tierras por una denuncia interpuesta ante el Ministerio del Poder Popular para las Comunas donde hacían constar que la EPS no estaba produciendo y que en consecuencia había que devolverle las tierras a la gente.

Mediante informes jurídicos, cuya deficiencia compromete su legitimidad, los antiguos dueños pretenden, les sean devueltos «sus derechos» sobre la propiedad de las tierras por «estar improductivas». Sin embargo, en ningún momento han dejado claro estar en condiciones de recuperar tales derechos para trabajarla.

Actualmente la Carbonera- Empresa de Propiedad Social de la Comuna Cuencas Unidas de Macho Capaz está viviendo una reestructuración. El colectivo que viene levantando la producción, en su mayoría de lácteos y agrícolas, pretende retomar el plan de siembra y una parcela demostrativa, la primera de 10 hectáreas, con diversos rubros y otras metodologías de trabajo, una distribución que rompa con el monocultivo y que además se asuma desde la agroecología. La producción de la comuna sirve a tres puntos de mercado comunal, dos mercados comunales campesinos y uno obrero para la distribución a servidores y servidoras públicas. De 270 hectáreas, el 40% está poblada de árboles, pinos y eucaliptos. Se están trabajando 80 hectáreas para semovientes lo que implica una producción en el 50 % del territorio para bovino. De 80 hectáreas para cultivo se produce en un 40%, el objetivo es cubrir con el plan de siempre el 100% del territorio productivo para finales de año.

Este ejercicio de poner en pugna a diversos sectores de la comunidad, en un momento de crisis, golpea los saldos organizativos que el Poder Popular ha construido con mucho esfuerzo. La Carbonera es un espacio de resistencia organizativa y productiva, al estar bajo un sistema de economía de guerra que azota todos los niveles de la vida social. Nos advierte Luis Barboza, comunero de la zona: «El colectivo que ha venido trabajando allí lo ha hecho desde su óptica de aprendizaje, y para nadie es un secreto que el proceso de madurez del Poder Popular no es de la noche a la mañana, pero la gente que no entiende y está en contra de estos procesos toma como vanguardia este elemento y además utiliza a parte de la comunidad como escudo para justificar la presencia en el territorio.»

La manipulación que estos hacen, de algunos integrantes de la comunidad del entorno de «La Carbonera» no es más que un ejercicio restaurador de unos derechos ya ilegítimos, basados en criterios destructores de la capacidad productiva de la gente común. Utilizar a parte de la comunidad como grupo de choque y escudo humano les permite dividir el entramado social y disponer del territorio desconociendo la administración del mismo por la Comuna.

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